viernes, 3 de abril de 2015

EN LA CHARCA DEL PUENTE VIEJO








Mientras las flores  crecen en mi sartén
al arrullo aromado de la aceituna,
en la charca del puente viejo canta la rana
su croar de poeta puro y primario
y,  en mis macetas, sin paz ni amor,
busca alimento un gorrión.



De mi balcón flotando –no pude evitarlo-
tus palabras perversas, yo fui colgando.
Por eso ahora, casi todas las noches de luna llena,
bailo al son del tango de las reyertas.
Con tus palabras haré un rosario
para cantarte  un Réquiem  desconsolado.




Divorciada  que quiere llorar sus risas.
Enlutada en la pira de la tristeza
llorando lágrimas de pan quemado.
El corazón es como un pez blanquiazul
brincando en una red de tisú.
Quiere huir y no sabe a dónde ir.




Abramos ya el encierro de la monjita
porque   las profundas sombras
                 de los altivos cipreses
le  azotan  la cara con sus verdinegras ramas.
Y un temblor de amargura relampaguea
en sus ojos de lluvia de primavera.




Ella tejía sus sueños de lino pardo
y teñía las madejas de oro pálido.
Sin quejas, sin reproches se fue olvidando
de bailar para nadie su tango amargo
y, sin embargo, se preguntaba al amanecer
¿volveré a estar viva alguna vez?




Mientras las flores crecen en mi cazo sin mango,
se expande el perfume insolente de las retamas
y, en la charca de los sapos, nos cantará una rana
cuántas veces, en un año, se lanzó al agua.




En sus ojos turbios de rana ajena al dolor de los celos,
la ausencia de los hijos y el temor a envejecer,
percibe su soledad en la charca, como un placer.



Alcalá de Henares, 3 de abril de 2015


JUEGO DE LA PALABRA DADA
PALABRA: SURREALISMO
DADOR:  RAMIRO RODRIGUEZ RUIZ
Texto e imágenes realizadas por Franziska
Las fotos de los bonsáis se realizaron en el Jardín Botánico de Madrid 



Utopia

    Conjugáremos  los verbos sin futuro y ya no existirán condicionales ni conciertos, contratos ni otras causas que el presente c...