martes, 28 de agosto de 2012

Un árbol centenario




El viento balancea
un árbol solitario
en el campo.
Es una imagen fija,
como un reflejo
dormido en el recuerdo.

Sobre sus ramas se han posado
millares de lluvias frescas
y, también, algunos rayos
del dios agrario,
le han azotado
en los inviernos pasados.

La brisa ligera
ha besado sus ardientes hojas
en verano.
Impasible ha visto
pasar el tiempo.

Ahora tiene las sienes blancas,
semiabiertas, las pupilas;
y ya no puede escuchar
el trinar de los pájaros.
Es un árbol viejo.

Sin embargo, su corazón
aún presta asilo
a las puestas de mirlos y vencejos.
Es humilde
tampoco exhibe cuentas
de cuántas primaveras
ha vuelto a renacer
llenándose  de flores y de hojas.

Cada noche
sonríe con ternura
a las estrellas
porque aún está vivo.
Habrá de llegar el rayo que lo encienda
o el hacha solitaria que lo abata.
¡Quién sabe!

Alcalá de Henares, 4 de julio de 2012
Texto e imagen de Franziska
(Publicado con fecha 28/08/2012)


lunes, 20 de agosto de 2012

Hay palabras hermosas




A veces pienso
qué habría sido de mi vida
sin el calor que me dieron
las primeras palabras de acogida.

Y las nanas cantadas
mientras me arrullaban
los brazos de mi madre…

Y ahora,
cuando ya me voy marchando,
poco a poco,
¿Qué habría sido de mí
si no hubiera sentido que la vida
es una sustancia
siempre por descubrir,
que hasta el fondo
debe ser explorada
con la razón dispuesta
y el corazón en brasas.

Y mi corazón cantando
buscando tus pensamientos
como el polen a los vientos…

Creo que mi vida
no hubiera sido posible
-ni siquiera merecería recordarla-
sin tantas emociones encontradas.

Ya que sólo atravesando las pasiones
se alcanza la más intensa emoción:
el pensamiento.

Porque el pensamiento
nace y se hace con palabras
y éstas, una a una,
van dando forma al alma.
Hay palabras hermosas
que en el fondo del corazón
han crecido a sus anchas,
con las que vamos sembrando
lo que somos, lo que queremos ser.

Escogí para ti mis mejores palabras
las más sinceras, las más honradas y verdaderas…

Porque no es insignificante
el más oscuro no o el más radiante
cuando en mi corazón
se aloja el compromiso,
cuando ya la certeza me posee,
ese sí o ese no, han hecho, a veces,
un largo recorrido
que ha penetrado, con pasión,
todos mis sentidos para llegar
a convertirse en un sonido breve
pero con una sonoridad
repleta de matices.

Alcalá de Henares, 20 de agosto de 2012
Poesía de Franziska, alias Raitán
Imágenes en movimiento realizadas por Franziska 

miércoles, 15 de agosto de 2012

AMARSE A SÍ MISMO




Amarse a sí mismo
es el comienzo
del único romance
que ha de durar  la vida entera.
Los otros amores nos defraudan,
aparecen, nos llenan y, después,
acaban desvaneciéndose en la nada.




Si la vejez resulta tan ingrata
es porque hiere nuestro narcisismo
y reduce la belleza
-de la que hicimos gala-
a un recuerdo que se esfuma
en la penumbra de un ayer
que nunca más ha de volver.

Vejez última infancia de la vida,
es la patria del juego, de la risa,
la que corremos a buscar cada alborada:
footing, yoging y todas las actividades
que nos lleven al mundo de las hadas,
un lugar sin espejos ni mañanas
una patria de amor, de luz, de magia.




Si al bastión del orgullo te aferraras
justificarías  ante ti mismo
y es posible que ante los demás,
que aceptas las cosas, no como son
pero sí como la sociedad pretende,
que las arrugas de tu piel están grabadas
no sólo en tu corazón sino
que han desgarrado tus entrañas.




La vejez de dentro es la de fuera.
No más paños calientes         
quiso decirnos un poeta:
llamemos a las  cosas por su nombre
porque nadie se ofendió jamás
porque se le llamara joven.
Lo más lamentable de todo es esta guerra
entre el poder caduco del mayor


y el ansia del joven que lo espera.





Un mundo como el nuestro
que, del esplender de la juventud
hace su patria y su bandera,
no considera que los niños y viejos
son su pasado y su futuro:
los unos inocentes, los otros desvalidos,
reclaman la atención que se merecen.






JUEGO DE LA PALABRA DADA
 
Palabra:  vejez

Dador:  Claudio Jiménez Villadiego



Alcalá de Henares, 15 de agosto de 2012
Texto e imágenes realizados por Franziska




Nota.-  Las fotogradías de las flores de almendro  fueron tomadas en el mes de febrero de 2010
muy avanzado ya el mes de febrero, en el Parque madrileño de "La Quinta de los Molinos" que fue primero una finca privada y que pasó después al Ayuntamiento.  Esta es la razón por la que se pueden contemplar más de mil quinientos almendros, característica que no se da en ningún otro parque de la Comunidad de Madrid.  Cuando hice esta visita aún eran muy pocos los almendros que habían florecido.  De todos modos, fue como siempre, un auténtico placer. 






  

domingo, 5 de agosto de 2012

La cara oculta de un poema


Los poetas mentimos mucho
porque la realidad
tiene poco que ver con la poesía.

Lo que yo escribí se leerá entre comillas:


“Allí te amé.
En los oscuros peldaños,
el viento se movía entre tus pies.
Resplandecía la luna
sobre las farolas del puerto.
Entonces, los días errantes
marcaban mi camino”.

La cruda realidad era:

Allí te amé –eso es verdad-.
En la escalera del metro
había un olor a algo sucio:
podría ser un rancio olor a pies.
Estaba muy nublado
seguro que la luna
no se ocupaba de nosotros
pero, sobre el pavimento,
sí estaban ya encendidas las farolas.
Entonces mis días de parado
no me permitían estar quieto en ningún lado.

“A veces, amanece
y hasta mi alma está cubierta
por el rocío de mis lágrimas.
Resuena el mar tan lejano
y una gaviota se descuelga
de tus brazos en niebla.
Allí te amé.”

A veces, cuando llega el día
me despierto con una pesadilla
y creo que tu cabeza
reposa ya sobre mi almohada
y que son tus ronquidos
lo que me ha conmocionado.
Así es que cambio de postura
y seré yo el que siga roncando.

“Fue un instante pero te amé.
Te estoy amando aún
y, a veces, envío mis besos
navegando en veleros a buscarte.
Naves perezosas
que nunca habrán de llegar
a su destino.”

¿Por qué voy a negarlo?
Me enamoré.  Y, ahora,
no sé cómo huir de esta trampa.
A veces, te he enviado mis besos
en los correos de Internet
pero debo cometer algún error
al escribir tu dirección de el Hotmail.

“¿Por qué son tan tristes los muelles
cuando arriba la noche?
Sin embargo, la luna siempre asoma
y posa en mí sus celajes de sueño.
Con sus ojos tremendos
me mirarán las estrellas de fuego.
Yo aún amo tu piel de cereza.”

¿Por qué es tan triste dormir en un banco?
El cansancio me agota, al fin me duermo.
¿Por qué se quedaran sin apagar
en toda la noche
 las farolas de un  coche?
Con sus ojos tremendos
 parece que me acusan.
Aún amo el contacto con tu piel
eso que tu barba hirsuta, raspa un tanto.
A ver si un día de estos vas y te rasuras.

“Quizás las olas esta noche
querrán entonar tu nombre
como yo lo recuerdo.
Aquí te amé.
Fue un instante eterno.”

Quizás las cigüeñas esta noche
querrán parpar tu nombre
dormido en mi recuerdo.
¡Será posible que ya no sé cómo te llamas!
¡Hace ya tanto tiempo
que perdí mi agenda de recuerdos!


Alcalá de Henares, 5 de agosto de 2012
Franziska



 

miércoles, 1 de agosto de 2012

ESTA MAÑANA PUEDE ESTALLAR LA PRIMAVERA





Todo pasará, las cosas van y vienen.
Siempre podemos sembrar
un luego de ilusiones
que crecerán mirando al sol

y regarlas con las risas frescas
de las mañanas de domingo
llenas de luz y halos de misterio.

 

Y los amaneceres, volverán a tener
un sentido y un afán sinceros:
algo así como el vuelo salvaje de las aves.

Y dejaremos los sueños en la almohada.
Así, a la mañana siguiente,
será como el aseo de la mente:
enérgico cepillado de propósitos.




Pisada firme, mirada sonriente,
no ha ponerse el sol sobre tu frente.
Encontraré en la vida lo que busque
yo sé que mi destino aún espera

así es que rápido, a la calle,
esta mañana puede estallar la primavera.

Y nos pondremos el mundo por montera.
Ya no dirán que me escondo de mi misma
con los ojos cansados para ver las estrellas,
tras  mi juego de palabras encendidas.



Ya no dirán que mi vejez temprana
se ha tornado amarilla y es toda canas;
que caen, con precisión, de mi reloj
una gran cantidad de horas muertas.

Dirán, para nuestra alegría y nuestro asombro,
que todo el mundo oye nuestros versos
que los mayores tenemos derecho al universo
y que han  dejado de escucharnos sin atención,

como quien oye llover, si no hay tormenta.

Empieza el fin de la incomprensión.
Se acerca, a pasos agigantados,
la era de todos los derechos del mayor.


Alcalá de Henares, 2 de agosto de 2012
Texto e imágenes de Franziska, alias Raitán

Utopia

    Conjugáremos  los verbos sin futuro y ya no existirán condicionales ni conciertos, contratos ni otras causas que el presente c...